La presión sobre los recursos naturales de nuestro planeta y el desafío que supone el cambio climático requiere una respuesta rápida por parte de todos.
Estos planes también incluyen inversiones en I+D para fomentar la innovación en sostenibilidad e incorporar nuevas tecnologías, procesos y materias primas sostenibles a nuestras actividades y también a nuestras fincas.